LA ESCUELA EN REDES

Ingenieros por el mundo

Ingeniero: CARLOS JAVIER MARTÍNEZ DE ILARDUYA MUGARZA
Titulación: Ingeniero Industrial Especialidad Electricidad (2006/11) y Máster en Integración de las Energías Renovables en el Sistema Eléctrico (2011/12)
Puesto actual: Iberdrola Renovables. Jefe de Zona O&M eólico y fotovoltaico – Zona Norte (País Vasco, Cantabria y La Rioja)

En dónde trabajas:

Hace unos meses, en febrero 2022 empecé a trabajar para Iberdrola Renovables como Jefe de Zona O&M eólica y fotovoltaica en la Zona Norte de España. La gestión y mantenimiento de instalaciones existentes en nuestra geografía suponen un reto que normalmente pasa desapercibido cuando los aerogeneradores están funcionando, pero que involucra a un gran número de personas y recursos a fin de que las instalaciones sigan produciendo energía verde durante décadas

En mi caso, gestiono el mantenimiento y las grandes reparaciones de unos 250 aerogeneradores (225MW) repartidos entre varias instalaciones de Iberdrola Renovables repartidas en País Vasco, Cantabria y La Rioja. Para ello, tengo a mi cargo a casi una veintena de profesionales del sector así como contratas. Es un trabajo 24/7

Cuál ha sido tu trayectoria hasta llegar a ese puesto:

Cuando estaba terminando el máster en Integración de las Energías Renovables en el Sistema Eléctrico en la ETSI de Bilbao, surgió la oportunidad de empezar a desarrollar mi carrera profesional en el extranjero en SP Energy Networks (ScottishPower). Así que en 2012 empecé el Programa de Graduados de dos años de duración en Liverpool, Reino Unido.

Tras dos años, conseguí un puesto en el departamento de Nuevas Conexiones para clientes trabajando como Ingeniero de Dirección de Proyectos de Construcción hasta 33kV. Ahí pude desarrollar unas habilidades que me ayudaron a promocionar a Ingeniero Senior de Diseño de proyectos de reemplazo y refuerzo de la red hasta 33kV en 2016. Durante ese tiempo, decidí ampliar mi formación con un MBA especializado en Gestión de Proyectos de 2 años de duración. He desarrollado esta función en SP Energy Networks hasta que me surgió la oportunidad de poner en práctica lo aprendido tanto en el máster de Integración de las Energías Renovables en el Sistema Eléctrico como el MBA con un rol de gestión de Operación y Mantenimiento en Iberdrola Renovables.

Estar trabajando en el Reino Unido durante casi 10 años ha sido una experiencia enriquecedora tanto a nivel profesional como personal que la volvería a hacer y la recomiendo encarecidamente.

Háblanos de algunos de los proyectos más interesantes en los que has trabajado o trabajas:

Pues aquí se me dibuja una sonrisa al pensar en ejemplos de mis puestos:

  • Programa de Graduados. Identificar tramos de cables de alta tensión con faltas repetitivas para su reemplazo prematuro debido a que algunos cables tienen peor vejez
  • Dirección de Proyectos: Una subestación para un centro comercial, para un teatro y proyectos de conexión de generación distribuida en universidades y generadores de emergencia en un centro de distribución de comidas
  • Ingeniero de Diseño: reemplazo de las RTUs en la región (2 años de 8 previstos para completarlo), proyecto Black Start para incrementar la resiliencia de la red ante apagones, renovar subestaciones de más de 60 años de forma segura sin incidentes de seguridad
  • Jefe de Zona. En esto soy más novato y los proyectos son más de gestión de personal. Sin embargo, llevaré a cabo mejoras tanto técnicas como de seguridad en algunas subestaciones eléctricas de Iberdrola Renovables gracias a mi experiencia previa. Hace unos meses estuve cuestionando un diseño de una empresa sobre la posición de unos fusibles de Baja Tensión para mejorar un procedimiento de trabajo, resultaba que no era correcto y usé libros de la universidad para justificar mi decisión antes de que se implementara en más instalaciones.

¿Qué crees que se te da bien, o que las empresas en las que has estado/estás han valorado de ti?

En el Reino Unido, la forma de ser de los españoles junto con la formación con la que salimos de las universidades es muy altamente valorada. Al estar además en otro entorno y hablando otra lengua es algo que admiran profundamente. Quizá diría que nuestro interés por aprender y que no haya obstáculo o reto en el trabajo y en la vida que nos acobarde, sino que nos motiva su superación son unas actitudes no muy comunes en otras sociedades.

¿Por qué decidiste ir a trabajar a Reino Unido? ¿Te atrajo la experiencia de trabajar fuera o fue más por ir a una determinada empresa?

Cuando estaba terminando el máster en la ETSI de Bilbao fui afortunado de tener algunas ofertas (no muchas tampoco) pero la idea de trabajar en el extranjero y aprender un nuevo idioma me atraía mucho. No hice Erasmus durante mi período universitario y era algo que me habría gustado probar. La oferta de ScottishPower era quizá lo más cercano a sentirme fuera de la zona de confort para crecer como persona, que tanto recomiendan los compañeros que sí fueron de Erasmus.

Si has estado trabajando o trabajas en Reino Unido. ¿Qué universidades tienen prestigio allí en ingeniería?

En el Reino Unido, las universidades de Strathclyde en Glasgow y la de Manchester tienen gran prestigio entre ingenieros eléctricos. Conviene recordar que muchos de los grandes inventores e ingenieros de la historia salieron de sus aulas. Quizá parte del éxito reside en las instalaciones de prácticas de las universidades, colaboraciones con empresas para realizar proyectos cercanos a la industria y algo muy importante como es el hacer presentaciones en público.

Si has estado trabajando o trabajas en Reino Unido. ¿Qué disciplinas de la industria tienen allí un mayor peso?

Reino Unido es mundialmente conocido por su sector bancario y de finanzas, donde no sólo los economistas tienen cabida sino también los ingenieros. Sin embargo, no debemos olvidar que a su vez es un país con gran atractivo industrial. Al ser una isla, están muy acostumbrados al comercio comprando en el extranjero mucha materia prima y revendiéndola con valor añadido. Son líderes mundiales en eólica marina, tienen una gran industria automovilística y aeronáutica, y los roles comerciales también son altamente demandados.

¿Qué recuerdos guardas de tu paso por la Escuela?

La Escuela fue como mi segunda casa durante 6 años y mi recuerdo es muy grato. Siempre digo con orgullo que soy un ingeniero de la Escuela de Ingenieros de San Mamés. Al principio fue un salto bastante grande desde el colegio a 1º de carrera con asignaturas de alto peso teórico como Álgebra y Química, las cuales no había cursado en el colegio. Como es lógico, a medida que pasaban los cursos y nuestros conocimientos de base aumentaban, aparecerían más asignaturas que nos llevaban a los laboratorios donde podíamos ver lo que habíamos estudiado aplicado en la práctica. Por tanto, puedo decir que la experiencia mejora con el tiempo y eso es algo positivo cuando empiezas una carrera de varios años de duración y tan exigente en la Escuela.

Aún así, me quedo con el compañerismo que creábamos entre los alumnos, el buen ambiente con los profesores que siempre estaban ahí para consultas y consejos. Desde que dejé la Escuela sigo yendo una vez al año a saludar a profesores.

¿Qué le aconsejarías a nuestros alumnos de 1º y 2º?

Al comienzo, a mí me resultó duro el salto del colegio a la universidad. Diferentes horarios, forma de organizarse, deberes,…reconozco que estaba algo perdido al comienzo y se juntaban asignaturas más difíciles “de ver” que lo que estábamos acostumbrados en el colegio. Sin embargo, hay que ser capaz de ver que antes de poder trabajar en algo debes aprender el manejo de las herramientas, la técnicas y la teoría a fin de poder aplicar los procedimientos de forma adecuada. Cuando empiezas un trabajo, pasas por fases similares, pero cuando llevas toda tu vida académica en colegios e institutos, aún no lo has experimentado y puede ser desmotivador la primera vez que te enfrentas a esta fase.

Sin embargo, lo principal es que tengáis en mente el destino de lo que queréis lograr como carrera profesional y quedaros con las experiencias vividas en el camino. Además, os diría que no os cerréis a ciertas asignaturas que os gusten ahora. La vida profesional es de unos 40 años y vuestros intereses y necesidades evolucionarán del mismo modo que es probable que las cosas que os gustan ahora en muchos casos no son idénticas a las de hace 10 años. Disfruta lo mejor de cada cosa que se os presente y pásatelo muy bien, nunca sabes si en 20 años los apuntes que tomas hoy en clase son los que algún día releerás para empezar un trabajo que aún no has imaginado.

¿Y a los alumnos que están a punto de terminar y van a incorporarse al mercado laboral?

La vida laboral es de unos 40 años y tras 10 años trabajando y habiendo cambiado varias veces de trabajo dentro de la misma empresa, aún me siento joven y con ganas de aprender, mejorar y cambiar muchas veces más. Muchas de las cosas que he hecho en 10 años no formaban parte de lo que había imaginado estando en vuestra situación a punto de terminar la universidad, pero mirando atrás, reconozco que las he disfrutado todas y cada una. Así que mi principal consejo es que no busquéis el trabajo “perfecto” nada más empezar a trabajar, ya que tendemos a idealizar y si no logras eso o no es como lo esperabas, puede ser frustrante si piensas todo el esfuerzo invertido. La vida laboral está llena de aciertos y errores (de lo que más se aprende), pero todos ellos son experiencias que os harán crecer a nivel personal como profesional. Disfrutad cada uno de los pasos que deis en la vida. Nadie llega a ser Director General sin experiencia ni todo el mundo quiere ser Director General (no hay que idealizar trabajos por su título). Buscad vuestro propio camino, que si disfrutáis en el trabajo, ese es el mayor éxito.

Por otro lado, tuve la gran suerte de añadir al reto de empezar en el mercado laboral, la experiencia de vivir en el extranjero y aprender un idioma y disfrutar de una nueva cultura. No es para todos, pero no os quedéis “con lo que está al lado de casa” sino sed valientes y buscad aquello que os haga felices.

 

Ingeniero: EDUARDO ORTIZ DE GUZMÁN
Titulación: Ingeniería Industrial, 2010-2016 (2010-14 Grado, 2014-16 Máster)
Puesto actual: Iberdrola – Offshore WTG Senior Engineer

En dónde trabajas:

Actualmente trabajo en Iberdrola, en el desarrollo de parques eólicos offshore. Más específicamente, me encargo de la gestión técnica relacionada con las propias turbinas eólicas, los aerogeneradores: fabricación, suministro, transporte, instalación y puesta en marcha, teniendo en cuenta las interfaces y relaciones con el resto de los sistemas y elementos. 

Es una verdadera pasada, porque las turbinas son cada vez más grandes y se optimiza la generación de energía, pero a su vez complica el diseño y la ejecución. Las turbinas del parque eólico de Baltic Eagle, que está ahora en construcción, tienen 174 metros de diámetro, y ya hay diseños con rotores de casi 250 metros de diámetro. Eso son palas de más de 100 metros, es algo enorme para diseñar, fabricar, transportar e instalar y requiere de un análisis muy complejo.

Cuál ha sido tu trayectoria hasta llegar a ese puesto:

En mi último año de carrera (2016), empecé a trabajar en IDOM, en el departamento de Análisis y Diseño Avanzado. Estuve cuatro años, en los que estuve involucrado proyectos de para la industria eólica, estructuras singulares, mecatrónica, etc.

Después de unos años me surgió la oportunidad de asumir un rol más de gestión en Iberdrola, dentro del departamento de Operaciones Globales, implementando los procesos y sistemas para comercializar electricidad, gas y otros productos y servicios, desde la contratación hasta las tarifas, la experiencia del cliente, canales de venta, digitalización, etcétera. Se trabaja con grandes volúmenes de datos y hay que ser muy dinámico para implementar los sistemas de forma ágil y robusta. Pero tres años después quise volver a algo más técnico y relacionado con las energías renovables, y a ello me sigo dedicando actualmente.

Háblanos de algunos de los proyectos más interesantes en los que has trabajado o trabajas:

Ahora mismo estoy involucrado en el proyecto Baltic Eagle, que incluye 50 turbinas eólicas de casi 10 MW. En proyectos de esta envergadura es mucho más difícil estar al tanto a un nivel global; yo estoy centrado en lo relacionado con los propios aerogeneradores y sus interfaces, un mundo muy interesante porque está en constante evolución. Ahora estamos viendo implantar soluciones que hace muy pocos años se trataban como conceptos futuros y ya han llegado a producción. Ver ese desarrollo tecnológico desde la fase de I+D hasta la producción es espectacular.

Previamente, dentro de Iberdrola estuve trabajando en operaciones, en el desarrollo del sistema de comercialización de electricidad para el mercado alemán, analizando tanto el funcionamiento del propio mercado a nivel técnico y regulatorio como los usos y costumbres de los clientes. Se diseñaron e implantaron procesos automáticos y sistemas para minimizar el trabajo manual y tener la información controlada. Cuanto más control se tiene sobre los datos, más información de calidad se extrae y más se aprende para mejorar y ofrecer a los clientes un mejor servicio.

En mi etapa en IDOM, estuve varios años trabajando en el diseño y desarrollo de un banco de ensayos, una máquina para realizar ensayos a rodamientos de aerogeneradores offshore para el Fraunhofer IWES. Se trata de una plataforma Stewart de 11,5 m de diámetro a 8 metros de altura actuada por servoactuadores hidráulicos de 350 toneladas. Fue muy gratificante porque pude vivir todas las fases, desde el diseño conceptual hasta la fabricación, el montaje y la propia puesta en marcha. Yo mismo estuve en Hamburgo durante meses durante las fases de montaje y puesta en marcha, y fue una experiencia espectacular tanto en lo profesional como personal.

Banco de ensayos para rodamientos de aerogeneradores offshore*1

¿Qué crees que se te da bien, o que las empresas en las que has estado/estás han valorado de ti?
Sobre todo, la proactividad, la capacidad de resolver problemas. Soy una persona muy curiosa y me gusta mucho emprender proyectos nuevos y aprender continuamente. Esa curiosidad me hace tener una buena predisposición para afrontar tareas muy diversas y tener una perspectiva lo más global posible sobre lo que hago. Y creo que soy bastante dinámico y capaz de tomar decisiones buscando lo mejor para el proyecto y el equipo.

Si has estado trabajando o trabajas en Alemania. ¿Qué disciplinas de la industria tienen allí un mayor peso?
En Alemania, a nivel país, la automoción tiene un peso enorme, y la industria en general es más relevante que en España (siderurgia, industria química, eléctrica…). También hay mucha investigación y los temas relacionados con energías renovables están en auge, sobre todo la energía eólica, el hidrógeno, y el vehículo eléctrico.
En Hamburgo, que es la ciudad que mejor conozco, el puerto es importantísimo a nivel mundial, y genera muchísimo empleo y dinamismo. También hay, entre otros, una planta de Airbus, la central de Nivea, la de Hapag-Lloyd, el centro técnico de Lufthansa, astilleros…

¿Qué recuerdos guardas de tu paso por la Escuela?
Recuerdo que los primeros años fueron muy teóricos, y a medida que avanzaban los cursos las asignaturas iban cogiendo un carácter más práctico. Realmente de lo que tengo un recuerdo más claro es de los proyectos, tanto de fin de grado como de máster, ya que es donde estuve más involucrado personalmente y donde más aprendí, con diferencia. De alguna forma en esos proyectos empecé a ver el paso de los libros a lo que luego se desarrolla y se ejecuta en el mundo real. Y en lo personal, evidentemente conocí a muchas personas que hoy cuento entre mis amigos.

¿Qué le aconsejarías a nuestros alumnos de 1º y 2º?
Sobre todo, dos cosas… la primera, que tengan ilusión por un propósito, un objetivo. El estudio no siempre es agradecido ni agradable, y por eso tener en la cabeza metas un poco más elevadas, aprender, crecer como persona, mejorar… es de ayuda. Suena muy idealista, pero tener como metas en el horizonte solo exámenes es poco motivante para cualquiera. Y la segunda, que no desesperen y que sean constantes, que los días duros pasan rápido y que antes de que se den cuenta estarán muy contentos de lo aprendido y vivido.
Y a un nivel más práctico, que estén al tanto de herramientas, programas, tecnologías, tendencias, etc. que les puedan ser útiles.

¿Y a los alumnos que están a punto de terminar y van a incorporarse al mercado laboral?
La verdad es que hay muchísimas cosas, y la mayoría las irán viendo ellos mismos en cuanto salgan de la universidad… por ejemplo, que busquen algo que les guste y motive, y que se involucren y sean curiosos, proactivos, para aprender todo lo posible. Es un topicazo, pero se pasan muchas horas a la semana trabajando; si se hace a disgusto, es un sinsentido a medio y largo plazo. Hay muchísimas oportunidades ahí fuera, y no hay que tener miedo de tomar decisiones o de moverse si no se está cómodo o algo no gusta.
Y hay que creer en uno mismo, no ponerse techos, porque normalmente somos capaces de bastante más de lo que uno mismo cree. Hasta que no tenemos delante un reto que nos ponga a prueba, no descubrimos esa parte de nosotros mismos.

*1 Referencias:
https://www.idom.com/noticia/entrega-banco-ensayos-rodamientos/
https://www.iwes.fraunhofer.de/en/press/archive-2019/bearing-test-bench-now-fully-functional.html

Ingeniera: CAROLINA LOPEZ DE UGARTE
Titulación: Ingeniería Industrial, 2011-2017 (2011-15 Grado, 2015-17 Máster)
Puesto actual: Stryker- Senior Process and Product Quality Engineer

En dónde trabajas:
Trabajo desde febrero 2022 en Stryker, una empresa norteamericana de tecnología médica. Stryker ofrece productos y servicios innovadores en equipamiento médico y quirúrgico, neurotecnología, ortopedia y en la sede de Cestas (Burdeos, Francia), donde trabajo, implantes y equipamiento para columna vertebral.
Formo parte del equipo multidisciplinar que trabaja en un proyecto estratégico para la empresa en el que, en los próximos dos años, vamos a doblar la producción de nuestra sede con la incorporación de más de 30 productos y sus correspondientes máquinas y procesos de fabricación. Más concretamente, me encargo de coordinar y garantizar mediante la implantación de técnicas de mejora continua lean manufacturing y de inspección de producción, que los nuevos productos tengan una calidad intachable ya que los implantes serán introducidos en el cuerpo humano y los instrumentos son primordiales para el éxito de la operación por parte de los profesionales médicos.

Cuál ha sido tu trayectoria hasta llegar a ese puesto:
El segundo año de master lo realicé en la universidad de Cranfield, Reino Unido, gracias al convenio de doble titulación con nuestra universidad. Los últimos meses, mientras trabajaba en el proyecto de fin de master, la universidad de Cranfield nos puso muchas facilidades para ayudarnos a encontrar trabajo en Reino Unido. Decidí postular a Renishaw, una empresa que había visitado en uno de los módulos del master, ya que quería probar a trabajar en el ámbito de la fabricación y los productos de Renishaw (sondas palpadoras para medir por coordenadas, encoders, interferómetros lasers…) me parecían productos mecatrónicos complejos en sí mismos, y por tanto, con aplicación a procesos de fabricación interesantes, como así fueron.
En Renishaw, he ocupado dos puestos.
El primero, durante 1 año, como Process Improvement Engineer, en el que era responsable de una de las líneas de producción. Mi día a día se dividía en resolución de problemas de producción de carácter reactivo, investigación de problemas técnicos de devoluciones de clientes y desarrollo de actividades proactivas para mejorar la eficiencia de la producción reduciendo el coste de calidad del ensamblaje del producto.
El segundo, durante casi 4 años, fue como Process Development Engineer, donde era responsable del desarrollo y gestión de proyectos de mejora continua de diferentes líneas de producción. En la parte más técnica, era la encargada del diseño mecánico en CAD, puesta en marcha y ejecución de todo lo necesario para obtener la óptima explotación de los procesos/ herramientas/ máquinas, incluyendo validación de ensayos y en la parte más de gestión de proyectos, la generación de planes y presupuestos realísticos para la entrega del trabajo de desarrollo.

Háblanos de algunos de los proyectos más interesantes en los que has trabajado o trabajas:
Uno de los proyectos más interesantes en los que he participado ha consistido en el desarrollo de un sistema mecatrónico que permite a Renishaw ofrecer al cliente realizar ensayos de repetitividad de las sondas palpadoras como servicio en sus propias fábricas. Esto permite al cliente asegurarse que su sonda sigue funcionando correctamente después de años de uso sin tener que parar la producción más de unas pocas horas.
Un palpador es la parte del sistema de medida que hace contacto con el objeto a medir para detectar su posición, haciendo que se desplace el mecanismo de la sonda. La señal generada permite que se tome la medida. Nuestro sistema mecatrónico compara esta señal emitida por la sonda con una señal mecánica, generada con un sensor montado en un motor lineal. El sensor produce una señal al contacto físico con el palpador. El motor lineal lleva integrado un encoder, también de Renishaw, y, por lo tanto, en los instantes indicados por las señales tomamos las posiciones de ese encoder.

En la siguiente figura se muestra un esquema:

Se toman 10 valores en una dirección y 10 en la otra, se calcula la repetitividad del sensor, la repetitividad de la sonda y el “pretravel” (la diferencia entre la posición del encoder en el instante de la señal de la sonda y de la señal del sensor, que tiene un valor medio para cada tipo de sonda y que debe ser también repetitiva). Y esto mismo se repite para diferentes ángulos gracias a un motor de rotación, ya que la sonda debe ser funcional en sus 360 grados.
Los grandes desafíos del proyecto han sido que el sistema debe tener precisión nanométrica y que debe ser transportable, por lo tanto, debe ser robusto pero desmontable, y aun así, alcanzar las especificaciones exigidas. También debe moverse para hacer las medidas en los diferentes ángulos, pero debe tener un freno perfecto cuando está tomando las medidas.

¿Qué crees que se te da bien, o que las empresas en las que has estado/estás han valorado de ti?
Creo que se me ha valorado mucho la actitud, por un lado, estar motivada e implicarme totalmente en cada proyecto, pero también ser autocritica. En cuanto a las capacidades más ingenieriles, probablemente la capacidad de “think outside the box”, cuestionar, intentar resolver los problemas llegando a la causa raíz con metodología, pero pensando en todas las probabilidades.

¿Por qué decidiste ir a trabajar a Reino Unido? ¿Te atrajo la experiencia de trabajar fuera o fue más por ir a una determinada empresa?
Como he comentado, me animé a probar suerte a postular en Reino Unido durante los últimos meses de estudios en Cranfield, gracias a todos los contactos con empresas, charlas y visitas a fábricas, las ayudas con el CV ingles que nos ofrecieron desde la universidad etc. En ese momento, me apetecía la experiencia de trabajar fuera, pero yo creo que, si no hubiese encontrado ningún puesto interesante, me habría vuelto a casa sin problema. Vivir en el extranjero y empaparse de otra cultura es una experiencia maravillosa, recomiendo a la gente darle una oportunidad al Erasmus si pueden, y luego ver si les apetece probar a trabajar en el extranjero también. Destaco de Reino Unido la gran responsabilidad que te dan desde un principio, aun siendo junior.

¿Qué recuerdos guardas de tu paso por la Escuela?
Siento que nuestra universidad es muy exigente, y requiere hacer sacrificios, dedicarle horas de estudio… Cada asignatura es un reto en sí mismo que hay que ir sorteando para llegar al objetivo de salir con un diploma de ingeniería. Pero, hablándolo con compañeros, estamos todos de acuerdo que, en retrospectiva, el camino nos ha enseñado a reflexionar, a resolver problemas y a enfrentarnos a desafíos constantes, y ese bagaje es el que nos permite desempeñar a todos bien nuestro trabajo como profesionales en la industria. En la parte menos académica, he conocido a personas maravillosas que fueron un gran apoyo y que hoy siguen siendo un pilar fundamental en mi vida.

¿Qué le aconsejarías a nuestros alumnos de 1º y 2º?
El cambio con respecto al instituto es grande y cuando estás tan enfrascado y dedicas tantas horas a algo, es fácil que te afecte psicológicamente cuando algo no sale como quieres o cuando te están constantemente poniendo problemas complejos. A mi yo del pasado le diría que relativizara porque esos momentos son parte del aprendizaje, hay que encontrar la forma de desconectar y coger fuerzas para el siguiente desafío, pero no es el fin del mundo suspender una asignatura. Sin duda, en esta carrera de obstáculos, es muy importante rodearse de personas con las que te sientas a gusto y con las que apoyarse y ayudarse.

¿Y a los alumnos que están a punto de terminar y van a incorporarse al mercado laboral?
Una cosa que me preocupaba especialmente de cara al mercado laboral en los últimos años de carrera, era equivocarme al escoger la especialidad o el primer trabajo y acabar haciendo algo que no me gustase en la práctica, porque al final te puede gustar una especialidad más que otra, pero algunos vamos un poco ciegos al primer empleo. Tenía miedo a que las decisiones de esos últimos años de universidad fueran a determinar mi carrera profesional irrevocablemente, sin vuelta atrás, porque yo al menos no tenía claro qué especialidad quería hacer.
Y en mi experiencia, he descubierto que todo es mucho más cambiante y flexible, que, si tus gustos e intereses cambian con el tiempo, siempre se puede discutir con tus superiores y hacer nuevas formaciones, moverte internamente o incluso buscar nuevas oportunidades en otros lados. Dentro de Renishaw, tuve la oportunidad de cambiarme de puesto y ahora que recientemente he empezado en un sector totalmente diferente, tampoco he tenido ningún problema con el cambio.

¿Tienes pensado volver a trabajar algún día al País Vasco?
Pues en febrero, llegué a Francia, empezando con mucha ilusión esta nueva etapa, aunque me dio también mucha pena dejar mi trabajo anterior, en el que he aprendido tanto, y mis amigos de Bristol. Mi pareja es de Francia y hemos encontrado Burdeos muy atractiva, no muy lejos de las dos familias y con empresas interesantes en el ámbito de la ingeniería. Pero, por supuesto que volver al País Vasco será siempre una opción. A lo mejor para la siguiente etapa 😉